Inge y Jacques comparan su juventud con la vida actual. Con los cambios que se han producido en el mundo de los medios de comunicación, la globalización y la digitalización, la rutina diaria y el mundo laboral se han transformado drásticamente. Se han creado nuevos oficios y en muchos sectores se ha condensado el trabajo, es decir, hay menos gente que debe asumir más tareas. En muchos empleos, es necesario contar con conocimientos de idiomas e informática. Para hacer carrera, en la mayoría de los sectores, hay que estar dispuesto a seguir formándose y a adaptarse a las nuevas tecnologías.
Muchas situaciones laborales exigen más flexibilidad que hace décadas: contratos laborales temporales, largos deplazamientos hasta el puesto de trabajo y proyectos laborales en equipos internacionales. Por otro lado, las computadoras permiten trabajar desde casa o desde cualquier sitio.
A muchas personas les preocupa el futuro. Tienen miedo de que el progesivo desarrollo de la tecnología acabe con su puesto de trabajo.