Más de la mitad de los pisos en Alemania son de alquiler. Además del arrendo mensual hay que pagar gastos adicionales que incluyen la electricidad, la calefacción, el agua, la recogida de basura, etc. Los propietarios de los pisos deben pagar también gastos adicionales y un impuesto sobre la propiedad.

En Alemania, casi una de cada cinco personas vive sola. Y en las grandes ciudades, más de un tercio de los pisos están habitados por una sola persona. Las viviendas en las grandes ciudades alemanas como Berlín, Múnich, Hamburgo o Colonia escasean y son caras. Por eso, los estudiantes universitarios comparten los gastos de alquiler y viven en Wohngemeinschaften (pisos compartidos) o WG.