¿Celebras la Navidad y la Pascua? En Alemania,  estas dos festividades son las más importantes del año. En ambas ocasiones, las familias se juntan a celebrar, también cuando no son especialmente religiosas.  Sobre todo en torno a la Navidad, la fiesta en la que se celebra el nacimiento de Jesucristo, hay muchas costumbres y tradiciones.

Desde finales de noviembre, en casi todas las ciudades alemanas encontrarás un mercadillo de Navidad. En ellos puedes comprar adornos y regalos navideños. Puedes también tomar vino caliente y galletas tradicionales. ¿Has probado ya el Stollen, esa especie de pan dulce relleno de mazapán? En el tiempo de Adviento, las cuatro semanas anteriores a la Navidad, cada domingo se enciende una vela del Adventskranz (la corona de Adviento). Los niños reciben el 1 de diciembre un Adventskalender (un calendario de Adviento) con imágenes o dulces. Se trata de abrir diariamente, hasta el 24 de diciembre, una puerta o un paquete. Además, la mayoría de la gente en Alemania pone un abeto decorado, el tradicional árbol de Navidad. Bajo el árbol se colocan los regalos para la familia y los amigos el día de Nochebuena. Sobre todo los niños reciben muchos regalos. Hay mucha gente que esa noche va a la iglesia.

La Pascua, el domingo de Semana Santa cuando se celebra la resurrección de Jesucristo, siempre cae en marzo o abril. Ese domingo, Ostersonntag, a los niños les toca buscar por los jardines o las casas los Ostereier –huevos de chocolate o huevos normales que han sido pintados previamente-, también pequeños regalos. Se dice que el conejo de Pascua fue quien los escondió. Los huevos de colores son el símbolo de la vida, algo que en primavera, cuando la naturaleza vuelve del sueño invernal, se siente por todos lados.  Para celebrar la Pascua, en las casas y jardines se colocan ramas frescas decoradas con huevos de colores.