Actualmente se discute mucho, no solo en Alemania, sobre lo que uno come o deja de comer. Independientemente de los gustos individuales, casi todos están de acuerdo en que comer golosinas o dulces no es saludable y que es necesario comer más fruta y verdura.

A muchos alemanes les interesa saber de dónde vienen los alimentos que van a ingerir y cuáles son sus ingredientes. Debido a la tendencia “bio”, la gente busca productos que provengan de una agricultura orgánica. ¿Te han llamado ya la atención los muchos supermercados “bio” que existen en Alemania?

Más de cinco millones de alemanes se definen como Vegetarier y no consumen carne. Los Veganer van más lejos y no consumen ningún producto animal ni derivados: ni leche, ni huevos, etc. Los motivos son diversos: desde cuestiones de salud y críticas al sistema de transporte de animales hasta creencias relacionadas con una forma de ver y entender el mundo.

Muchos deportistas y gente que valora comer sano optan por una alimentación baja en calorías, en azúcar y en grasas; otros optan por una alimentación sin gluten. Esto último significa que evitan productos que contienen ciertos cereales, como por ejemplo, el pan, la pizza, la pasta o la cerveza. El grado de seriedad con que se toman estas tendencias alimentarias varía. En cualquier caso, antes de invitar a amigos a comer a tu casa, pregunta si hay algo que no coman.