La oferta gastronómica alemana

Un plato con col lombarda, tres trozos de carne guisada con salsa de color marrón y albóndigas de cereales
Carne, salsa, col y albóndigas de cereal: ésta es la imagen que se tiene de la comida alemana. Y es real, pero también puede de otra manera.null iStockphoto

¿Te gusta la comida alemana o eres de la misma opinión que Jacques? Él piensa, al igual que mucha gente, que la comida alemana es pesada, grasa, con demasiada carne y nada sofisticada. Con frecuencia, esta se suele reducir a la salchicha con col fermentada, el plato más conocido de la gastronomía germana en el extranjero. ¿Lo has probado alguna vez?

En comparación con otros países del sur europeo, la comida alemana es, en verdad, pesada. Esto se debe a que antiguamente, la población rural necesitaba alimentos con muchas calorías durante los largos y fríos inviernos. Muchos platos contienen carne de vaca o cerdo, y la guarnición más común son las papas. Sin embargo, hay diferencias regionales: mientras que en Baviera la comida es consistente, en el norte suelen comer más pescado, p. ej., arenques. La gastronomía alemana es variada y puede ser sofisticada, en contra del cliché.

Anímate a probar los platos regionales como, p. ej., Königsberger Klopse (bolas de carne en salsa de vino blanco con alcaparras), Rheinischen Sauerbraten (casi siempre carne de vaca marinada durante varios días), Maultaschen (raviolis alemanes rellenos) o Nordseekrabben (gambas del Mar del Norte). A propósito, la verdura preferida de los alemanes no es la col, sino los espárragos blancos.