Cultura y sociedad

La oficina

Gente trabajando en una gran oficina dividida por mamparas
Aunque a los empleados no les gustan mucho, las oficinas colectivas van al alza.null iStockphoto

Aproximadamente la mitad de los alemanes que está en activo trabaja en una oficina. La mayoría ocupa una oficina individual o una compartida con otra persona. Las oficinas colectivas en las que trabajan 10, 20 e incluso más personas al mismo tiempo –separadas unas de otras por biombos–  están menos difundidas en Alemania que, por ejemplo, en Estados Unidos. No obstante, su popularidad está al alza.

¿Conoces las oficinas más modernas? En algunas oficinas, los empleados ya no tienen un puesto fijo de trabajo; utilizan el escritorio que esté libre en ese momento y se conectan a internet desde cualquier ordenador. También hay personas que ya no tienen oficina; trabajan con sus ordenadores portátiles desde cualquier lugar, también desde una cafetería. En la modalidad homeoffice -trabajar desde casa- labora solo el 12% de la población alemana en activo. Una cifra que está por debajo del promedio de los países de la Unión Europea.

Sobre todo en ciudades grandes como Berlín, desde hace algún tiempo y cada vez con mayor frecuencia, existen los llamados coworking spaces, originalmente muy difundidos en California. Se trata de oficinas compartidas, espaciosas y abiertas, en las cuales los autónomos pueden alquilar, por un tiempo limitado, un sitio para trabajar. Este tipo de oficina es usada especialmente por la gente del ramo de la informática y del sector creativo.